Sin duda, donde más se gasta en las facturas energéticas del hogar es en la cocina, con electrodomésticos como el frigorífico, congelador, el horno o la cocina de gas o eléctrica. El uso constante de dicho espacio en el día a día de una familia, en el que pasamos muchas horas y que es considerado el corazón de una casa, hace que la cocina centre gran parte de nuestro consumo energético. Por ello, si tus facturas energéticas son elevadas y piensas en reformar la cocina, o simplemente tienes la necesidad de renovarla, en Certificado de Casa te detallamos cómo reformar la cocina para mejorar la eficiencia energética de tu vivienda.
Mejora la calificación energética de tu vivienda
Antes de entrar en materia, lo primero que debes saber es que si realizas reformas en tu casa, es esencial que posteriormente tramites tu Certificado de Eficiencia Energética. La calificación energética de tu vivienda habrá mejorado si has realizado una renovación del espacio pensando en reducir el consumo de energía y en ser más eficiente.
Recuerda que el Certificado de Eficiencia Energética es obligatorio para alquilar o vender una casa (consulta le ley) y deberás renovarlo si realizas una reforma, puesto que la calificación energética será distinta. Si vas a reformar la cocina para mejorar la eficiencia energética, deberás saber que con una mejor calificación, tu vivienda aumentará de valor y será vista con mejores ojos por parte de los compradores o arrendatarios.

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Más información sobre el Certificado de Eficiencia Energética:
- ¿Dónde hacer certificado energético de vivienda?
- ¿Cuándo se necesita el certificado de eficiencia energética?
- ¿Cuándo caduca el certificado energético de una vivienda?
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¿Cómo reformar la cocina? Primero, revisa tus facturas
Antes de iniciar una reforma, para tratar de ahorrar en tus facturas energéticas, analiza las tarifas de consumo de luz y gas que tienes contratadas. Analiza las opciones que tienes con las compañías con las que tengas contratados estos servicios para ajustar las tarifas al consumo que necesitas. No pagues más de lo que debes por un consumo que en realidad no tienes.

Reformar la cocina para mejorar la eficiencia energética: ¿Qué hacer?
Y ahora sí, entramos en el epicentro de este artículo: ¿cómo reformar la cocina para mejorar la eficiencia energética? A continuación, enumeramos los principales elementos que tienes que tener en cuenta para realizar dicha reforma:
Placas solares:
Una de las mejores opciones para aumentar la eficiencia energética de tu cocina es instalar placas solares en el tejado. Eso te ayudará a ahorrar energía eléctrica en toda la vivienda, y sobre todo, en la cocina, el lugar en el que más electricidad consumes. De esta manera, conseguirás no depender de la red eléctrica nacional y tener tu propio auto consumo de energía solar. Ahorrarás energía y serás mucho más responsable con el medio ambiente.
Piensa en la distribución y orientación de la cocina:
Distribución:
Tienes que tener en cuenta varias cosas. Lo primero, el distribuir la cocina con los electrodomésticos de frío como la nevera o el congelador ubicados lejos del horno, calefacción u otros emisores de calor como la vitrocerámica o los fuegos. Si el frigorífico recibe el calor del horno, gastará más energía para enfriar y alcanzar la temperatura deseada.
También recomendamos que formes un triángulo entre la nevera, la zona de la cocina y el fregadero o lavavajillas. Así, conseguirás optimizar el espacio de tu cocina.
Orientación:
Si tu cocina da al exterior y recibe la luz del sol, evita que la luz impacte directamente en los electrodomésticos de frío como la nevera.
Cambia las bombillas:
Ya que estás de reformas, no desaproveches la ocasión para cambiar las bombillas de tu cocina por luces LED. Son un poco más caras, pero a la larga, el ahorro energético que te proporcionarán habrá valido la pena. Aconsejamos que las cambies en toda tu vivienda.
Elimina las bombillas que no necesites:
A su vez, analiza si tienes demasiadas luces juntas, puesto que a veces, quitando una ahorrarás energía y no se notará la diferencia.
Colores:
¿De qué color debes pintar las paredes? Pinta la pared de un color que te haga sentir cómodo. Pero si no tienes ninguna preferencia, te aconsejamos que aproveches para darle una mayor luminosidad a tu cocina mediante el color de la pared. Por ejemplo, puedes usar el blanco, grises claros o rosas.

Electrodomésticos:
Cambia los electrodomésticos y apuesta por comprar los de mayor certificación energética. Lo que suele gastar más de una casa es la nevera y el congelador.
Fogones, vitrocerámica o inducción:
Próximamente, en Certificado de Casa realizaremos un artículo más específico sobre este tema. Pero de momento, te contamos lo esencial.
- Si no tienes preferencia en cuanto al tipo de cocina que quieres, puedes apostar por los fogones tradicionales, ya que que calientan antes y te permiten tener un mayor control sobre la temperatura. Además, son más económicas que las eléctricas debido a que consumen gas natural.
- No obstante, si lo que quieres es una cocina eléctrica y no sabes si instalar vitrocerámica o una cocina de inducción, te aconsejamos que apuestes por la inducción ya que consume de un 20 a un 40% menos que la vitrocerámica.
Para reformar la cocina es clave pensar en el aislamiento:
Como ya te indicamos en artículos anteriores, no pienses solo en la estética. Es normal que al reformar una cocina te centres en los electrodomésticos, pero no debes cegarte. Una parte importante de la eficiencia energética de tu cocina dependerá de un correcto aislamiento:
- Aprovecha la reforma para cambiar puertas, ventanas, etc.
- Piensa también en la calidad de los materiales y en sus cualidades.
- Sobre todo, fíjate en el aislamiento de los materiales que uses para tus paredes, techo y suelo.
- En este sentido, no te olvides de aislar puertas y ventanas de forma fácil y económica mediante burletes.
- Cambia las ventanas para mejorar el aislamiento y mejóralo también en la caja de la persiana
Además de reformar la cocina, mejora tus costumbres
No basta con reformar la cocina para mejorar la eficiencia energética. Además, tras la reforma también deberás intentar cambiar algunos hábitos. Te señalamos algunos.

Hábitos para ahorrar consumo más allá de reformar la cocina:
- Si friegas los platos a mano, utiliza un balde en el que puedas colocar tus platos para no tener que fregar y enjuagar cada uno mientras tienes el grifo abierto. Minimiza el gasto de agua. Lo notarás en tu factura.
- Tapa las ollas y sartenes en las que cocines. La temperatura se mantendrá y ello te permitirá reducir tu consumo energético porque cocinarás más rápido.
- No mantengas abierta la nevera y el congelador más de lo necesario. Si vas a la nevera o el congelador, piensa lo que quieres encontrar en ellos antes de abrirlos. Si tienes uno de estos electrodomésticos abiertos más de lo debido, perderá temperatura y gastará más al tratar de recuperarla.
- Desenchufa la tostadora, la cafetera o el robot de cocina cuando no los uses. Los electrodomésticos en ‘stand by’ siguen consumiendo.
- Usa los fogones adecuados. Si vas a cocinar con una pequeña paella, no hace falta que uses el fogón más grande a todo trapo.
- Apaga el horno unos minutos antes de lo previsto. Mantendrá la temperatura en su interior y seguirá siendo efectivo para que se cocine tu receta.

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